ActualidadDesarrollo sostenibleEmpresas

China pierde impulso y el buen clima en Sudamérica presiona a la baja los precios de los granos

El mercado internacional de granos atraviesa un cambio de escenario. El entusiasmo que semanas atrás generaban las compras chinas de soja estadounidense comenzó a diluirse, mientras el foco se traslada nuevamente a Sudamérica, donde el clima acompaña y refuerza las expectativas de una campaña muy voluminosa.

“Las compras chinas avanzan, pero el mercado empieza a dudar de que se llegue a las 12 millones de toneladas comprometidas. Además, muchos de esos embarques se concentran en un período en el que Brasil ya tendrá soja nueva disponible, lo que presiona a la baja los precios del poroto sudamericano, incluida la soja argentina”, explicó Dante Romano, profesor e investigador del Centro de Agronegocios y Alimentos de la Universidad Austral.

Los fondos especulativos reflejan este cambio de humor: tras una posición inicialmente muy comprada en soja, comenzaron a desarmar posiciones, en línea con un mercado que anticipa mayor oferta. En paralelo, las estimaciones privadas vuelven a ubicar la producción sudamericana cerca de 180 millones de toneladas, apoyadas en una normalización del clima tras algunas demoras en la siembra.

Cultivos bien implantados y alto potencial productivo para el país

En el plano local, las lluvias en el norte del país impulsaron con fuerza la siembra, mientras que en el centro y sur los pronósticos algo más secos ponen el foco en un enero clave para definir rindes. Aun así, el estado general de los cultivos es muy favorable.

“Hoy los cultivos en Argentina se ven muy bien. Más allá de algunas dudas climáticas hacia el sur, el nivel de humedad es mayoritariamente óptimo y sostiene expectativas de rindes elevados”, señaló Romano.

En soja, la siembra nacional alcanzó el 75,5% del área, casi 10 puntos por debajo del año pasado, pero en línea con el promedio histórico. El 96% de los lotes presenta condición hídrica óptima, especialmente tras las lluvias en el norte. Los pronósticos mantienen aportes para el centro-norte del país, aunque con menores registros hacia el sur.

“Con una Sudamérica bien abastecida y China comprando con más cautela, el mercado empieza a anticipar un escenario de precios más presionado para la soja, aun cuando la producción argentina muestra un muy buen potencial”, indicó el especialista.

Maíz: demanda firme y una campaña local muy relevante

El maíz muestra una dinámica distinta. Las compras sobre Estados Unidos siguen a muy buen ritmo y, pese a una producción elevada, los precios internacionales resisten gracias a una demanda activa.

En Argentina, la siembra ya cubre el 77,7% del área, con un avance semanal de 8 puntos. Si bien está levemente retrasada frente al año pasado, se ubica 12 puntos por encima del promedio histórico. El 87% del maíz temprano se encuentra en condición excelente o buena y ya transita su período crítico.

“Con la importante superficie de maíz temprano y lluvias que siguen acompañando, podríamos ver una cosecha cercana a las 30 millones de toneladas en esta primera etapa, lo que limita subas externas. Por eso, precios por encima de los 180 dólares resultan muy tentadores para la campaña nueva”, destacó Romano.

Para el maíz tardío, las mejoras en las lluvias del norte del país abren la posibilidad de alcanzar una producción total cercana a 60 millones de toneladas, siempre que el clima continúe acompañando.

Trigo: mucha oferta, precios atractivos y el desafío de la calidad

En trigo, el mercado internacional vuelve a sentir el peso de la oferta. Rusia definió una cuota de exportación de 20 millones de toneladas, el doble que el año pasado, moderando expectativas de una menor área en el próximo ciclo.

En Argentina, la cosecha avanza al 84,3%, con rindes promedio de 42,9 qq/ha, por encima de los promedios históricos. La recolección ya finalizó en el centro y norte del país y avanza hacia el sur, con un flujo de mercadería que se dirige principalmente a los puertos de Bahía Blanca y Necochea.

“Los precios locales en torno a 180/185 dólares por tonelada empiezan a generar interés vendedor. Con una cosecha tan grande y abundante oferta mundial, son valores que resultan interesantes”, afirmó Romano.

Sin embargo, el especialista advirtió sobre un punto clave: la baja calidad del trigo argentino, especialmente por los bajos niveles de proteína. “Esto implica descuentos de entre 5% y 8% en el precio recibido por el productor y obliga al exportador a buscar destinos forrajeros. Aun así, los altos rindes logrados compensan esos descuentos y le dan sustento económico a estos niveles de precios”.